UMBERTO D la dirigió Vittorio De Sica y es seguramente la
mejor película del neorrealismo italiano. El neorrealismo nace después de la II
GM y llega hasta los años 50 y consideraba que los filmes debían hacerse cerca
de la superficie de la realidad.
Umberto D nos describe la vida cotidiana de Umberto, un
anciano que vive con su perro Flaki en una cochambrosa habitación de una avara
propietaria la cual le quiere echar por no pagar la renta. La película sigue a
su protagonista mientras se enfrenta a la posibilidad de pueda perder su habitación
y quedarse en la calle para mendigar. Gradualmente conocemos lo principal de su
vida, donde vive, con quien se relaciona, sus dificultades. Todo lo que cuenta
la película esta contado sin falso dramatismo, todo lo que ocurre es de una
manera tranquila y lógica.
Umberto D nos habla
de la desesperación, de la soledad, de la dignidad y del orgullo.
Umberto se encuentra
desesperado y considera el suicidio como única salida, para ello tendrá que
encontrar a alguien que se haga cargo de su perro Flaki y es su cariño por el
perro lo que le salva, porque no puede ignorarlo y es su esperanza.
Se nota en varias secuencia la influencia del cine de
Chaplin y de su mano maestra. De Sica realizo una joya de película, hay muy
pocas películas en la historia del cine que desprendan la humanidad que ofrece
Umberto D.
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