DENZEL WASHINGTON ha llevado al cine la obra teatral de August
Wilson,y lo hace como director, productor e interprete. FENCES es una película
teatral, con lo bueno y lo malo que significa eso. Un guión potente y unas
actuaciones portentosas consiguen que a medida que pasa el metraje te vaya interesando lo que te
cuenta. Cuesta al principio y lo que parece que va a ser una fatiga luego va
tomando interés. Le sobran minutos y rigurosidad teatral, porque esencialmente
es una obra de teatro filmada y eso es un hándicap que me lastra durante toda
la película.
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