INFIERNO BLANCO (THE GREY). Cruda supervivencia

Lo primero que te esperas cuando vas a ver INFIERNO BLANCO es acción frenética, héroes poco menos que invencibles, lobos la mar de listos y asesinos, todo ello aderezado con una música potente, escenas espectaculares y una fotografía muy luminosa que de a todo el paisaje el mismo aspecto de estar en una merienda por las montañas.

  Pues nada de eso ocurre en es Infierno Blanco, porque de lo que realmente trata es sobre la supervivencia de una forma cruda y realista. Siete trabajadores de una petrolera consiguen sobrevivir a un accidente de avión en las cumbres nevadas y heladas de una zona remota de Alaska.  A las propias inclemencias de la montaña como el frío o el hambre se le une la persecución despiadada de una manada de lobos que les Irán diezmando poco a poco.

    Esta película se aleja de muchos tópicos de las películas de aventuras que llenan actualmente los cines y por el contrario hace un relato donde lo importante es el esfuerzo humano por sobrevivir en unas condiciones extremas. No hay concesiones, es la cruda realidad a la que se enfrentan los siete supervivientes, frío, hambre, miedo, desolación, soledad, porque miedo da la inmensidad de las montañas y terror produce la manada de lobos hambrientos que les persiguen sin descanso.

  Quizás uno de los errores de la película sea el abuso de algun flashback algo sentimentaloide y abusar de planteamientos existenciales. Por el contrario todo lo demás esta bastante bien, escenas poderosas, actores brillantes y un ritmo pausado que te permite ir adentrándote en la aventura sin perder de vista todo lo que ocurre en la pantalla.  

  Con los tiempos que corren es plausible que se hagan películas en la que prime la historia y los personajes por encima de la espectacularidad de películas vacías e inocuas.

INFIERNO BLANCO

THE GREY

Dirección & guión: Joe Carnahan (Ases Calientes, Narc, El Equipo A)

Protagonista: Liam Neeson