Dentro del genero del terror hay un subgénero que podríamos denominarlo como de “Casas encantadas”, este subgénero lleva en el cine tanto tiempo como las propias películas de terror. Allá por el año 1920 Jean Epstein dirigió “El hundimiento de la casa Usher” que contaría con un remake en 1960 por parte de Roger Corman.
A lo largo de las décadas este tipo de películas nos ha dejado innumerables títulos algunos de los cuales francamente buenos como: The Haunting (Robert Wise 1963), “Al final de la escalera” (Peter Medak 1979), “El Resplandor” (Stanley Kubrick 1980) o “Poltergeist” (Tobe Hopper 1982).
Parecía que ya estaba todo contado, que nada nos podría sorprender, que se había abusado tanto de este genero que ya todo lo que podría surgir seria pura rutina, pero ha aparecido la serie AMERICAN HORRROR STORY todo una sorpresa teniendo en cuenta además de ha sido ideada por Ryan Murphy y Brad Falchuk creadores de la infumable “Glee”.
La trama es muy sencilla un matrimonio y su hija adolescente se mudan a una casa, con un historial macabro, para comenzar una nueva vida, allí se encontraran a unos inquilinos un tanto especiales, que en algunos casos harán que sus vidas sean horrible y en otros casos trataran que su estancia sea algo mas placentera o como mucho menos terrible.
Durante sus doce capítulos iremos viendo todos los iconos del terror: una atmosfera perturbadora, unos personajes delirantes, unas situaciones que te enloquecen, pero lo que la hace diferente son sus personajes y su interacción entre ellos, creando situaciones bizarras, sexuales y violentas.
La serie mezcla perfectamente todos esos elementos consiguiendo una atmosfera romántica y gótica, perturbadora y angustiosa. Lo que parece un puzzle en el que difícilmente encajen las piezas poco a poco todo va teniendo su lógica, aunque gran parte lo deje a tu propia imaginación, ya que no tiene una línea argumental clara, porque en realidad nos cuenta nuestros propios miedos, nuestros horrores, en definitiva nos relata nuestras propias pesadillas y eso es lo que realmente nos perturba y lo que nos deja con una sensación de escalofrío.
En toda la serie apenas si salimos de la casa, vamos a la cocina, al salón, a los dormitorios, al desván y sobretodo a su inquietante sótano el cual oculta muchos y terribles secretos. Nunca llegamos a conocer realmente la casa, siempre nos sorprende con algún sitio nuevo, llevandonos en ocasiones a otras épocas de su pasado para mostrarnos quienes la habitaron y que terrible suceso ocurrio entonces. Poco a poco la mansion nos ira desvelanco todos los secretos que ocultan sus moradores.
Puede que te deje sin aliento o simplemente la dejes de lado, dudo que ocurra esto ultimo, ya que desde el primer capitulo te atrapara dentro de su, en apariencia, apacible morada.
Es una serie magnifica y una de las apuestas mas arriesgadas y complejas que he visto en mucho tiempo.
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